29.6.07


Cerca de las puertas

Los lectores de este blog ya lo saben. El código de Cerca de las Puertas queda establecido luego de quince meses de que se implementara. Sabemos que es un estado de alerta. Expectativa, latencia, avidez por lo que hay del otro lado. El conocimiento, la sensación verdadera. Capturamos una partícula de esa infinitud y todavía vibramos. Ganamos. Cambiamos. Y este espacio cambió en el proceso.

Hoy hay que intentar articular los elementos dispersos que se presentan en esta nueva etapa. Caldera que se va, sangría en el equipo, la Bruja en la Selección y Piatti en el Juvenil.

En la primera etapa soñamos y llenamos el club para recibir a Sebastián y dimos la vuelta; en la segunda soportamos el calor del verano mientras contemplábamos una preparación sólida para cumplir un objetivo que finalmente se logró. Ahora nos resignificamos y nos convertimos en otro equipo. Con rapidez, dinámica. El ojo avizor, fino, la mirada aguda en la compra de refuerzos. Hay plata por las ventas de Pavone y Sosa, son los tiros precisos del asesino profesional; usa lo estrictamente necesario. Tienen que venir jugadores que fortalezcan el mediocampo y delanteros predadores con mucho hambre. Cerca de las Puertas expone su posición: que se paguen los 2.900 mil dólares por Higuaín y la mitad de Galván. No compraría nada más, después que vuelvan Wilchez, Desábato y Basanta. Tal vez haría un intento por Torres y Milano. Alvarez es un buen jugador y demostró que tiene huevos, pero si tiene ganas de irse lo dejaría sin tanto escándalo. Lo de Caldera es distinto, es un gran ídolo. Lo vamos a extrañar mucho, estamos tristes.

No nos olvidemos de Pirchio, puede formar parte de la dupla de delanteros, me entusiasma. Sigue el Lechuga a quien le tengo una fe enorme, está la posibilidad del Bomba Senger, ojo. La ida del Payaso no se definió del todo, que se quede por favor, en estos momentos es indispensable. Esta es una etapa en donde el cuerpo técnico tiene que hacer otro juego. Un equipo más intelectual, más reflexivo, maduro.

Ayer fue 4 a 1 y volví a sentir una sensación de antes. Esto no es sólo de este blog, sé que lo comparto con muchos pinchas aunque cueste reconocerlo. Volví a querer que gane la celeste y blanco. En Alemania 2006 no sufrí porque el equipo de Pekerman y Sorín se volviera en primera ronda. No jugaba Argentina, eran nuestros enemigos.

Ahora está la Bruja, en los otros diez no confío. No es mi equipo, sólo aliento al que tiene la 20 en la espalda. Me quedo con ese tiro que estrelló en el travesaño, detalle en el que coinciden todos nuestros blogs. Volviendo al número, el 20, me parece que podrían haberle dado la 11 como cortesía. Hay que entenderlo, es la mala leche del pensamiento progresista de nuestro hipócrita país.

El equipo ganó y volvió a gustar luego de más de dos años. Diego fumó su habano sonriendo. Desde acá nos mantenemos alerta. Cerca de las Puertas llama a la reflexión. Pendientes de lo que pasa en City Bell, en Venezuela y en el Mundial Sub 20. Ganar la Sudamericana 2007 es el objetivo inmediato, la condición es traer un refuerzo que marque una diferencia. Mis opciones ya las señalé.

El canal permanece, el código es conocido. Alerta, críticos, reflexivos. Sigan cerca. Cerca de las puertas.

18.6.07


La gente festeja y vuelve a reir

El concepto, el sentido que rescatamos, lo que acuñamos y resguardamos es un profundo agradecimiento. Gracias al equipo, al cuerpo técnico, al club y a la hinchada. Cuánta gloria nos regalaron este año, cuánta garra y cuánta dignidad. Dignidad, por sobre todas las cosas.

El campeonato terminó y nos faltó poco para ganarlo, para lograr ese doblete que nos propusimos en enero mientras el calor abrasaba. Todos estabamos concentrando: los jugadores entrenando, el técnico planificando, la dirigencia abrochando los contratos y las incorporaciones; nosotros alentando, aguantando, construyendo el alma de Estudiantes. Llegamos al final sabiendo que se cumplió con la palabra, tenemos esa serenidad que nos da el deber cumplido. Pura decencia, el honor que nos distingue.

El gracias es infinito porque no hay manera de medir la felicidad que tenemos. Somos felices y eso es una sensación agradable. El Pincha termina la temporada en su resguardo místico, en donde las explicaciones -como siempre señalo en este blog- pierden su sentido. Están los que comprenden y los que no, los que sienten y los insensibles, los incrédulos y los que tienen fe. Nosotros creemos y nos va la vida en eso, sabemos que allí radica el secreto de todo.

El resto queda ahí, como sin saber adónde correr, dónde ampararse, dónde tener un lugar para estar en paz. Los que ganan, los que pierden, los que festejan, los que lloran; son todos iguales. Ningún equipo tiene el aura del Pincha, eso es algo fácilmente perceptible. Un ejemplo de esto es la diferencia que hay entre los dos campeones de la temporada: el del Apertura con la Bruja, el Tanque, Caldera y el Cholo en una muestra épica, con el Ruso Prátola sobrevolando una escena de hazaña; y el campeón del Clausura festejando en Bailando por un Sueño con el bufón de Tinelli. Todo un palo, ya lo ves.

El sentido que nos queda es un agradecimiento, un aire adentro que no se quiere ir. Es un toque interior que nos hace felices. Es un sentimiento de gozo, de placer. Salimos a la calle con nuestra sonrisa, con nuestra remera y con el orgullo de ser pincharratas. Este campañón, la mística del campeón, la historia, la tradición y todos los festejos que renacen y se conjugan ahora en muchos sentimientos. La paz, calma y el descanso del guerrero.

La mirada al más allá y el futuro. Nuevos desafíos nos esperan: La Libertadores, la leyenda americana y la revancha buscada (esta vez con Sebastián al mando de la cruzada). Sosita y el Tanque que se van, esplendorosos, con los brazos en alto, millones de aplausos para ellos y las manos y gargantas enrojecidas. Gracias campeones, todo el éxito en Europa y los esperamos para cuando quieran volver, esta es su casa. Resta rearmar al equipo y tal vez sea la tarea más difícil para el Cholo y su equipo. Abadie, Alegre y compañía, les digo: a no dormirse, que no pase lo mismo que con Galván, si hay que comprar, juéguense y gasten.

Y Cerca de las Puertas cumple su segundo campeonato, con un montón de visitantes y eso está buenísimo. Gracias también a todos ustedes por participar, por leer y por comentar. Gracias por pedirme las notas, estas dos últimas semanas por falta de tiempo no pude actualizar con la regularidad que prometí, pero no quería estar ausente en este momento tan importante. En serio, el agradecimiento es para todos ustedes, para todos nosotros, por formar parte de esta mística que emociona en todos los minutos del tiempo.

Quisera avisar que voy a postear, en este interregno que hay en entre los campeonatos, lo que me venga en gana. Tal vez alguna cosilla de la Copa América y fundamentalmente referente al fino juego del pelado capitán de la albiceleste del Coco, tal vez algo de música, de cine; cosas de Fogg, ya saben.

El final es una deriva absurda, un camino incierto con la sola consigna de festejar el momento. Veo y reveo mil veces los festejos de diciembre del año pasado. Sobresale esa canción de una banda que no vale gran cosa, La Mancha de Rolando, que dio su paso a la fama del brazo de este Pincha mitológico. Arde la ciudad, la gente festeja y vuelve a reir. Creo y los veo, están ahí, los fantasmas del campeón que siguen con su sonrisa y con la copa en alto.